Testimonios

9 agosto, 2018
Testimonios

Mensaje del Bar Mitzvá Iair Sidi de la Parashá Semanal:
Mi nombre es Iair y este fin de semana es mi Bar Mitzvá.
Leeré la Torá por primera vez. La Parashá semanal se llama “Reé”. Esta Parashá habla de la bifurcación de los caminos de la vida. Los caminos del bien y del mal, como de las decisiones que uno debe tomar para progresar. A veces esos caminos son más difíciles que los incorrectos. Esos caminos son como una Y. La base de la Y es el punto de partida en el que estamos. El punto en donde se unen ambos lados de la Y con su base, son los posibles caminos. Un camino es aparentemente más difícil, mientras que el otro pareciera ser más sencillo y fácil, pero la elección de cada camino trae diferentes consecuencias. A veces el camino que parece más fácil, cuando lo transitamos, nos damos cuenta que se empieza a complejizar y no siempre nos lleva al mejor destino posible, mientras que otras veces, el camino que en su comienzo parece ser el más difícil cuando uno empieza a transitarlo se da cuenta que es un camino que conduce a un mejor destino y es más sencillo y con más corazón una vez adentrado en él. Entonces, en el punto en que se unen los tres lados de la Y, es el momento de tomar la decisión. Un ejemplo de la Torá es cuando Moshé tuvo que tomar el camino difícil para liberar a los judíos de la esclavitud de Egipto, porque si en ese momento, Moshé hubiese elegido el camino que parecía más fácil, aún seguiríamos siendo esclavos en Egipto.
Otro Ejemplo es Teodoro Herzl, quien tuvo que tomar el camino difícil. El se enfrentó a la ira de los antisemitas, los judíos partidarios de la asimilación y a personas de su propio pueblo que creían que sólo el Mesías podía conducir de nuevo al pueblo de Israel a la Tierra Prometida. Murió muy joven, entre el aislamiento y la incomprensión de los suyos; pero puso en marcha un movimiento político que no se detendría hasta la creación del Estado de Israel en 1948. Si Hertzl hubiese tomado el camino fácil no tendríamos nuestro país, Israel, como lo tenemos hoy en día.
Un ejemplo llevado a mi vida personal es el camino difícil que representa hacer el Bar Mitzvá. Me llevó mucho tiempo y esfuerzo, dediqué muchas horas al aprendizaje pero hoy estoy feliz de que llegue este momento.